El gobierno de Camboya denunció este sábado que Tailandia continúa bombardeando su territorio horas después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciara que estos dos países del sudeste asiático habían acordado una tregua en sus enfrentamientos fronterizos.
Los últimos choques entre estos vecinos han causado una veintena de muertos y el desplazamiento de medio millón de personas en ambos lados. Tienen su origen en una larga disputa sobre la demarcación de su frontera de 800 km establecida en la época colonial.
Cada parte ha culpado a la otra de reavivar el conflicto.
"Los aviones militares tailandeses aún no han dejado de bombardear", añadió.
Primer ministro de Tailandia disuelve el Parlamento.
La acusación se conoce horas después de que Trump hubiera anunciado el viernes que los primeros ministros de Tailandia y Camboya acordaron detener los mortíferos enfrentamientos, tras una llamada con ambos líderes.
"Han acordado cesar todos los disparos a partir de esta noche y volver al acuerdo de paz original alcanzado conmigo, y con ellos, con la ayuda del gran primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim", añadió, en referencia a un pacto logrado en julio.
Los combates entraron este sábado en su séptimo día, dos más que en julio, cuando un episodio de violencia dejó 43 muertos y obligó a unas 300 mil personas a evacuar.
Estados Unidos, China y Malasia mediaron entonces un alto el fuego y, en octubre, Trump respaldó la declaración conjunta de un acuerdo de paz.
Trump habló con líderes de Tailandia y Camboya tras nuevos choques fronterizos.
Tailandia suspendió el acuerdo al mes siguiente, después de que varios de sus soldados resultaran heridos por minas terrestres en la frontera.
Con información de AFP.


